Estaba sentanda en su amaca, con su cóctel de la mano.
La típica muñeca que toda niña tiene de pequeña, rubia, con ojos azules y sus cantidad de complementos.
Es Barbie.
A Hugo no le gustaban nada las barbies, a parte de ser porque es un chico, también, porque su hermana pequeña siempre está jugando con barbies y diciendo :
" Barbie por aquí, Barbie por allá " " Mamá, mamá, ¿me compras la nueva casa de la Barbie con su coche?"
Hugo estaba más que harto.
Se acercó a Barbie y le dijo :
- Hola, te llamas Barbie, ¿no? Porque mi hermana se pasa el día jugando con una muñeca igual que tú.
- En realidad no me llamo Barbie, me llamo Blair.
- A mi nunca me han gustado las muñecas y menos las barbies porque me parecen pijas y creídas.
- Todo el mundo dice lo mismo, y me hacen sentir mal. En realidad no soy lo que aparento ser.
Hugo se quedó asombrado y pensó para si mismo :
" Me he equivocado, además de no ser creída y pija es muy guapa "
Blair continuó hablandole y Hugo cada vez se sonrrojaba más.
Pepona, Hubbard, Blair y Hugo se fueron a un parque, en el que hicieron un picnik.
Se hizo muy tarde y todos, se fueron a dormir. Hugo se fue a casa de Hubbard.
Los dos, se pasaron toda la noche hablando, sin conseguir dormirse. Cuando la conversación llegaba a su parte más emocionante, ocurrió lo que Hugo más temía y entonces...
No hay comentarios:
Publicar un comentario